jueves, 26 de junio de 2014

El fuego de la memoria

Continúan los recuerdos, en su rutina, trayendo a nuestra memoria algunas historias entrañables. 


EL CHUPA-CHUPS

Una vez vi un chupa-chups en una tienda de chuches. Era  rojo y verde y estaba colgado de una guita. Cuando lo vi  me recordó muchísimo al que me regaló mi abuela el día de  San Valentín. Desde ese día lo tengo colgado en el espejo de mi cuarto. A pesar de que ya no está, cada vez que lo veo me acuerdo de ella.


Mª  Dolores Reina Guerrero. 3º Diversificación

TE HE ECHADO DE MENOS
Cada vez que estoy en la soledad de mi habitación y suena esa canción ,"Te he echado de menos", me acuerdo de esas tardes de verano en Ibiza, cuando nos íbamos mi primo y yo a la playa. En especial recuerdo aquel día en el que fuimos a dar una vuelta en una barca de plástico que teníamos.

Un día se nos pinchó y tuvimos que nadar durante un buen tiempo hasta que llegamos a una pequeña playa que estaba escondida. Allí había unos seres muy raros que vestían  todos de  blanco y negro. Al vernos con nuestras ropas de colores se quedaron muy extrañados. Rápidamente, mi primo y yo pensamos que estábamos en un sueño. Pero no, estábamos en medio de una especie de fiesta que tenían montada aquellos seres. Pero era un poco triste porque no tenía música ni nada.
 Entonces, decidimos hablar con Mi-Mi uno de los seres más jóvenes que encontramos allí. Le preguntamos que de dónde eran. Ella nos dijo que eran de otro planeta, que todos los años venían a ese lugar a celebrar la fiesta del sol.
Conversamos durante horas y, de repente, nos dimos cuenta de que ya era tarde y que deberíamos regresar. Decidimos llamar a casa desde el móvil, pero el teléfono comunicaba. Esperamos un rato hasta que nos devolvieron la llamada. Entonces sonó esa canción. Todos se quedaron un poco extrañados al ver que de una cosa tan pequeña saliera una voz. Por eso, cada vez que suena, me acuerdo de Mi-Mí la que ahora es una de mis mejores amigas, ya que cada año vamos con esos seres raros a celebrar la fiesta del sol.

Arabia Suárez Carmona. 3º Diversificación



         Una foto, un recuerdo
Estaba ordenando el desván con el fin de encontrar el baúl de los disfraces, cuando apareció una caja llena de fotografías antiguas. Me puse a verlas y eran mías de pequeña. Todos estaban mucho más jóvenes, cómo se notaba el paso del tiempo, pensé.

En las fotos salíamos en la playa , en la comida de Navidad, en el Zoo… Pero había una foto que yo no sabía de su existencia. En ella salíamos mi madre y yo. Estaba embarazada de mi hermana. Creo que en esa foto estaba ya de 7 meses. Salíamos las dos en la playa.
La foto me recordó a cuando mi madre me dijo que iba a tener una hermana. Me lo contó una mañana de Junio. Fuimos al médico mi abuela y yo acompañándola. Ella entró en  la consulta y cuando salió nos lo comunicó. Fue una noticia que no esperaba.
Después de recordar aquello, guardé todas las fotos menos aquella fotografía. La puse en mi habitación.
Ana Moreno Guerrero. 3º Diversificación.

domingo, 15 de junio de 2014

Ganadora Primer Certamen de Poesía



María Dolores García (3º B) ha sido elegida  ganadora del Primer Certamen de Poesía del IES Federico García Lorca.  En sus poemas hemos encontrado a través de las palabras la máxima expresión del sentimiento amoroso. Ha sabido utilizar con una maestría, similar a la de muchos poetas, la antítesis y la paradoja para expresar ese sentimiento: unas veces triste, otras alegre; unas veces traicionero, otras acogedor; unas veces dulce, otras trágico; pero en toda su esencia, AQUEL que da sentido a nuestras vidas.
                     
                       I
Me gusta que te quedes
cuando el resto ya se ha ido.

Que cuando me hunda me levantes
o te hundas conmigo.

Me gusta cómo me miras.
cómo consigues hacer
que hasta el peor de los días
acabe sabiéndome bien.
Cómo aparentas serenidad,
cuando hay una batalla ahí fuera.


También me gusta
que te enfades.
Que insistas.
Que resistas.
Que no te dejes callar.
Que puedas ser una fiera
o un cordero.
Que no te dejes domesticar.

Me gusta que seas tú.
Me gusta que hagas que sea yo.
Me gusta que seamos nosotros.
 
        II

Nunca pensé
que pudiera doler la nada.

Nunca pensé
que pudiera
llenarme tanto el vacío.

Nunca pensé
que pudiera quebrar mi voz
con un grito ahogado.

Nunca pensé
que fuera un mar de lágrimas
el que fuera a bañar mi piel
con más frecuencia.

Nunca pensé
que alguien de apariencia tan cálida
tuviera un corazón frío como el hielo.

Nunca pensé
que la soledad
sería mi única compañera
en este viaje hacia ninguna parte.

Tampoco pensé que fueras a marcharte,
y qué idiota fui
al no darme cuenta de que,
de alguna manera,
ya hacía mucho tiempo que te habías ido.

  

                 III



No hay nada que siente peor
 

que ver cómo te alejas lentamente.


Y tus recuerdos


se disipan como el humo de un cigarro


a punto de consumirse.


Pero nunca terminas de marcharte.


Y cuando creo que no me pareces 


importante,


que no me duele el verte de esa forma,


vuelves a aparecer


con más fuerza y astucia que nunca.


Y vuelves a llevarme por tus calles,


a recordarme lo que fuimos


y los sueños que perseguimos.


Y haces que vuelva a enamorarme.


Lo peor es que no puedo hacer nada por evitarlo.



Y eso, amigo, es lo que más jode.


Porque luego


vuelves a desaparecer


sin dejar rastro.


Como un sueño fugaz


del que nunca consigo despertarme.













 



miércoles, 11 de junio de 2014

Carta personal


Siempre es un buen momento para echar mano de la página en blanco y cargarla de nuestros mejores sentimientos para enviárselos a alguien. Nunca nos recordarán por nuestros pensamientos más ocultos, así que pon en marcha tu memoria, habla con tus seres queridos, diles lo que sientes por ellos y si quieres que tus palabras permanezcan para siempre, dedícales tus mejores letras por escrito con una carta.


Para mi papá

Querido papá:
Van pasando los días y por fin se acercan las vacaciones. Pronto acabará este curso que hace ya casi nueve meses que lo empecé, siempre con tu apoyo. Y aunque tú hace más de un año que estás lejos, sigo teniéndolo. Quiero que sepas que ya mismo estaré allí contigo dándote la lata (después no te vayas a quejar).
    A veces me acuerdo de los momentos más bonitos que hemos pasado juntos, cuando me regalaste los perritos, que tú sabes que cuidé con tanto cariño. También recuerdo cuando, hace años, me compraste aquel peluche de Pitufo, con un cabezón enorme y que pesaba un montón. Todos nos reíamos de aquella enorme cabeza.
Espero que cuando vaya nos lo pasemos tan bien como antes y que no lloremos tanto como cuando te marchaste. Porque tú te tuviste que ir por nosotros, para trabajar en Ibiza.
Te quiero mucho papá y cuento las horas que me quedan para volver a vernos
Muchos besos.

Isabel Recio

Para mi buen amigo Marco


Querido amigo Marco:
Cuántas ganas tenía de escribirte estas palabras. Hoy finaliza el curso que comencé hace nueve meses con toda la ilusión del mundo. Cuando llegué al Lorca solo quería conocer a mis profesores y a mis compañeros. El primer día de instituto empecé a ponerme muy, pero que muy nervioso. Más tarde fui cogiendo una confianza esplendida con mis compañeros y con mis profesores. La mejor profesora que me cayó al llegar al instituto fue Patro, con la que tengo muy buena relación y me aconseja que escriba estas y otras cosillas.
Me acuerdo mucho de ti, sobre todo de cuando venías a mi casa a jugar a la Play y al fútbol. Espero que vuelvas pronto por aquí y quiero que sepas que en mí tendrás siempre un amigo para todo, para lo bueno y para lo malo. Aún recuerdo esos días de gloria haciendo nuestras travesuras y perrerías, jajaja...
Bueno , me despido hasta otro momento. Espero que sigas tan bien.Te quiero mucho, Marcos.

Agustín Torres

Para mi maestra Inés

Querida maestra Inés:

Ya hace dieciocho meses que me fui del colegio. No sé si lo sabes, pero repetí mi primer año en el Lorca. A pesar de este tiempo que ha pasado, aún recuerdo los buenos ratos que pasé contigo y con mis nuevos compañeros, que ahora va cada uno por su camino. Me acuerdo de mi primer día en el Santa Ana y de los ratos que echábamos jugando al bingo. Por cierto, hace mucho tiempo que no veo a tu hija. Algunos te recordamos como la mejor maestra y tutora que hemos tenido. ¿Cómo te van por ahí las cosas? ¿Son muy malos tus nuevos alumnos? Ojalá pudiera volver a esa misma clase.
Cuańto siento tener que despedirme de ti, tanto ahora como cuando dejaste de ser mi maestra; pero es el destino el que elige nuestro recorrido por este proceso que llamamos vida.
Recuerdos de tu alumno Mark.




Para un amor imposible

Querido...

Te escribo estas palabras para que sepas que lo nuestro es imposible. Todos estos años que he pasado a tu vera nunca los olvidaré debido a que has sido mi primer amor, y aún el único. Pero he pensado que tengo pocos años, catorce, y que no tengo edad para estar amarrada a nadie. Son pocos los años que disfrutamos de la juventud y esos los quiero disfrutar sin ataduras. Ahora quiero aprender a volar, y aunque tú tengas que llorar por mi, la vida sigue, quieras o no quieras. Tendré que hacer de nuevo mi vida e irme de tu vera.
    Algún día querré tener a alguien y seguro que me acordaré de ti, y te buscaré, porque nunca podré olvidar todas las cosas que he vivido contigo, amor. Pero en este momento quiero ser libre, quiero ser feliz, disfrutar y aprender cosas nuevas. Puede también que no te vuelva a hablar, todo es posible; pero quiero que sepas que te quiero y siempre llevaré en mi mente esa sonrisa tan perfecta. Algún día nos veremos, cruzaremos nuestros caminos, y no te extrañes si me sale esa risa tonta que no me puedo aguantar cuando me miras sin sonreírme.
      Cuando miro la luna me acuerdo de aquel día que fuimos al poli de noche para ver las estrellas. Fue una noche inolvidable. Te amo y te llevaré siempre en mi corazón , pero tengo que madurar y hacer este camino sola. Espero que siempre seas muy feliz, aunque no sea conmigo, y que guardes siempre esa cara de niño por dentro y por fuera.
      Te quiero.

Anónimo